El predicador Yiye Ávila falleció a sus 87 años en su residencia en Camuy.
Tommy Figueroa, vicepresidente del Ministerio Cristo Viene y de la Cadena del Milagro, confirmó la información e indicó que falleció el viernes aproximadamente a las 8:30am.
Figueroa indicó que el Dr. Paz, le informó a los familiares que había fallecido de un “infarto cardiaco masivo”.
José Joaquín Ávila, nombre de pila del predicador, llevaba 53 años sirviendo al Ministerio Cristo Viene.
Al predicador le sobrevive su hija Doris Ávila y nueve nietos. En el 2009, el predicador sufrió la muerte de su hija, la pastora Iris Noemí Ávila Talavera, en un accidente vehicular en Venezuela. En el 1989 otra de sus hijas, Carmen Ilia Ávila, fue asesinada por si esposo.
En el 2012, el Senado de Puerto Rico bautizó uno de los salones de conferencia del edificio Baltazar Corrada del Río con el nombre del evangelista puertorriqueño José Joaquín “Yiye” Ávila.
Ávila, nació en el 1925 en el barrio Camuy Alto, en Camuy, estudio premédica con intenciones de dedicarse a la medicina, pero optó por la enseñanza y fue maestro de química y biología por 22 años.
Ávila no solo tuvo una exitosa y ascendente trayectoria como evangelista, sino también como estudiante, educador y deportista.
El evangelista internacional creó hace 53 años en Puerto Rico el Ministerio Cristo Viene, extendiéndolo luego a América Latina, a países como Colombia, Venezuela, Bolivia, República Dominicana y a Estados Unidos.
En 1988 creó la “Cadena del Milagro” que se transmite internacionalmente.
Ávila nació en Camuy en 1925. En las biografías publicadas sobre su persona, se señala que fue “un joven luchador y destacado en todas las ejecutorias y metas que se proponía”.
Estudió en la Universidad Interamericana de San Germán, que entonces se conocía como el Instituto Politécnico, obteniendo un bachillerato en Ciencias Naturales. Luego completó estudios de pre médica con miras a continuar sus estudios en medicina, pero su vida dio un giro.
De acuerdo a sus biógrafos “Dios le tenía preparado un don de sanidad divina el cual llevaría salud a los cuerpos de miles, por medio de la oración de fe y del poder sanador que hay en Cristo Jesús”.
Tommy Figueroa, vicepresidente del Ministerio Cristo Viene y de la Cadena del Milagro, confirmó la información e indicó que falleció el viernes aproximadamente a las 8:30am.
Figueroa indicó que el Dr. Paz, le informó a los familiares que había fallecido de un “infarto cardiaco masivo”.
José Joaquín Ávila, nombre de pila del predicador, llevaba 53 años sirviendo al Ministerio Cristo Viene.
Al predicador le sobrevive su hija Doris Ávila y nueve nietos. En el 2009, el predicador sufrió la muerte de su hija, la pastora Iris Noemí Ávila Talavera, en un accidente vehicular en Venezuela. En el 1989 otra de sus hijas, Carmen Ilia Ávila, fue asesinada por si esposo.
En el 2012, el Senado de Puerto Rico bautizó uno de los salones de conferencia del edificio Baltazar Corrada del Río con el nombre del evangelista puertorriqueño José Joaquín “Yiye” Ávila.
Ávila, nació en el 1925 en el barrio Camuy Alto, en Camuy, estudio premédica con intenciones de dedicarse a la medicina, pero optó por la enseñanza y fue maestro de química y biología por 22 años.
Ávila no solo tuvo una exitosa y ascendente trayectoria como evangelista, sino también como estudiante, educador y deportista.
El evangelista internacional creó hace 53 años en Puerto Rico el Ministerio Cristo Viene, extendiéndolo luego a América Latina, a países como Colombia, Venezuela, Bolivia, República Dominicana y a Estados Unidos.
En 1988 creó la “Cadena del Milagro” que se transmite internacionalmente.
Ávila nació en Camuy en 1925. En las biografías publicadas sobre su persona, se señala que fue “un joven luchador y destacado en todas las ejecutorias y metas que se proponía”.
Estudió en la Universidad Interamericana de San Germán, que entonces se conocía como el Instituto Politécnico, obteniendo un bachillerato en Ciencias Naturales. Luego completó estudios de pre médica con miras a continuar sus estudios en medicina, pero su vida dio un giro.
De acuerdo a sus biógrafos “Dios le tenía preparado un don de sanidad divina el cual llevaría salud a los cuerpos de miles, por medio de la oración de fe y del poder sanador que hay en Cristo Jesús”.
Fuente: laprensa.hn
Por: Roy Vargas
Por: Roy Vargas